La vida de Miguel Morales es un ejemplo de cómo la fe y la perseverancia pueden llevar a una transformación profunda y duradera. En sus propias palabras, él describe su viaje desde la adicción hasta encontrar una paz interior que nunca imaginó alcanzar.
Un Camino de Redención
Miguel Morales es una persona que ha vivido una transformación profunda en su vida. Su historia es un testimonio de cómo, incluso en los momentos más oscuros, la fe puede ser un faro de esperanza. Al compartir su historia, Miguel lo hace con sinceridad y gratitud, destacando que no se avergüenza de su pasado, pues ha sido parte de su proceso de crecimiento y cambio.
“No me avergüenzo porque... Dios hizo cosas grandes conmigo.”
El Inicio de la Lucha (1979)
En 1979, Miguel ingresó a un hogar CREA con la intención de cambiar su vida y dejar atrás las adicciones. Durante siete meses, se mantuvo firme en su propósito, pero su lucha no terminó allí. Tras ese tiempo, volvió a caer en el consumo, enfrentándose a un ciclo de recuperación y recaída. Esta etapa fue marcada por altos y bajos, una constante batalla interna por mantenerse libre de las drogas.
“Yo estuve en un hogar CREA, donde allí me quise rehabilitar. Duré como siete meses ahí... sin tener que usar drogas, pero luego volví de nuevo.”
La Caída y la Transformación (1998 - 2010)
En 1998, Miguel se mudó a Estados Unidos en busca de un cambio. Consiguió trabajo, pero sus viejos hábitos lo siguieron, y eventualmente volvió a caer en las adicciones. Fue en el 2010 cuando su vida dio un giro drástico. Miguel fue encarcelado, y desde ese momento, tomó la decisión de no volver a la misma vida. A través de su fe y una búsqueda genuina de Dios, encontró la fortaleza para cambiar de manera definitiva.
“En el 2010 caí preso. Cuando ya caigo preso decido decir: bueno, ya no más.”
15 Años de Paz y Éxito
Hoy en día, Miguel celebra 15 años libre de las adicciones. Atribuye su transformación a Dios, y reconoce que no fue algo que pudiera haber logrado solo. Su vida ha dado un vuelco total: ahora disfruta de una paz interior, estabilidad económica y una vida tranquila, en la que ya no teme por su seguridad o bienestar.
“Dios cambió mi vida. Y como te digo, ya llevo 15 años fuera de todo... Solamente Dios cambió mi vida... Nosotros no podemos con nuestra fuerza, pero Dios sí puede.”
Un Mensaje de Esperanza
Para Miguel, su historia no es solo un testimonio personal, sino una fuente de inspiración para otros. Él quiere que las personas que estén pasando por situaciones difíciles sepan que hay una salida, y que esa salida está en la fe y en buscar a Dios. Su mensaje es claro: no importa lo perdido que uno se sienta, siempre hay una segunda oportunidad.
“Dios cambia, Dios cambia y transforma a la persona. Aquellas personas que estén pasando por las situaciones que yo pasé... les reitero que traten de visitar la iglesia, que busquen de Dios, que Dios cambia. Dios me cambió a mí y para mí ha sido un éxito.”
Escucha el testimonio original aquí: